¿Qué es?

Se estima que el 20% de las personas han tenido una urticaria en su vida, que no ha vuelto a repetir y de la que no se sabe la causa. En la mitad de los niños con urticaria, ésta se acompaña de angioedema (hinchazón de párpados, labios o pabellones auriculares).

Causas

Muchos de los casos de urticaria en los niños “quedan sin resolver”, es decir, nunca se sabrá el desencadenante o causa de la erupción. Además puede nunca más volver a aparecer.
La formación de los habones es debida a la liberación, por parte de los mastocitos (un tipo de célula del sistema inmunológico que está en la piel) de una sustancia llamada histamina. Existen diversos mecanismos que pueden activar  a los mastocitos y, que son, las diferentes causas de la urticaria:

  • Alérgica: la urticaria está mediada por la inmunoglobulina IgE y pueden causarla: alimentos, medicamentos, inhalantes, látex o insectos
  • Infecciones: muchos virus, bacterias y parásitos activan  a los mastocitos y provocan una reacción en la piel en forma de urticaria
  • Estímulos físicos: ejercicio, frío, calor, sol, presión…. Todos ellos, en personas sensibles pueden causar la presencia de habones
  • Alteraciones metabólicas: déficit de C1 inhibidor, intolerancia a aspirina y antiinflamatorios, angioedema hereditario, enfermedad del suero o una vasculitis
  • Fármacos: contrastes radiológicos, opiáceos, polimixina B, antibióticos…
  • Enfermedades sistémicas: hipertiroidismo, enfermedades hepáticas, neoplasias, mastocitosis…

La urticaria se puede clasificar en:

  • Aguda: es la forma más frecuente y los habones duran menos de seis semanas
  • Crónica: es una forma poco frecuente en niños y los brotes de urticaria duran más de seis semanas

Síntomas

Las lesiones típicas en la piel son los habones que pueden aparecer por toda la superficie corporal. Son de un color rojo pálido o rosado y sobreelevadas (se tocan). Lo característico es que pican mucho y son fugaces (aparecen y desaparecen en horas o minutos).

En pediatría la urticaria suele ser una enfermedad benigna, pero el picor intenso puede interferir en la calidad de vida del niño. Además el aspecto del niño con una urticaria muy extensa y/o hinchazón de diferentes partes del cuerpo como labios o párpados puede crear alarma en los padres.

Cuando afecta estructuras vitales como la laringe puede poner en peligro la vida del niño. Por otra parte, la urticaria es la manifestación más frecuente de la anafilaxia y puede ser un signo precoz de una reacción alérgica grave, por lo que debe ser motivo de una estrecha observación.

Tratamiento

Como la causa de la urticaria es la secreción de histamina por parte de los mastocitos, el tratamiento de la urticaria se basa en la administración de antihistamínicos. En los casos graves o que presenten anafilaxia es necesario la administración de adrenalina y el ingreso hospitalario del niño. Si se sospecha una causa alérgica se deben realizar las pruebas de alergia adecuadas y evitar el alimento o sustancia que ha provocado los brotes de urticaria. En los casos de urticaria de larga evolución el Pediatra deberá revisar al paciente minuciosamente, valorando la necesidad de realizar otras exploraciones complementarias como analíticas, serologías y cultivos.