La mujer debe cuidarse después del parto para recuperar fuerzas. Los cambios son muy importantes, además de todo el ajuste de su vida a la nueva condición de madre. Por eso necesitará mucho descanso, una buena nutrición y ayuda.

Lo primero que aprenderán los padres es que los horarios de los bebés no suelen coincidir con los de los adultos. Lo más habitual es que coman cada 3 horas aproximadamente, aunque sobre todo los primeros días y con lactancia materna a demanda no hay horarios fijos, pueden estar a veces 3-4 horas sin comer y otras veces maman cada 1-2 horas. Las noches tampoco se respetan y no siempre serán los momentos de descanso de los padres. Deben aprovechar cuando el bebé duerma para descansar ellos, tanto sea de día o de noche, o bien sea a ratos cortos y con interrupciones o de forma más seguida.

Las primeras semanas

Las primeras semanas la madre necesita poder descansar y para ello es necesario que se ocupe de alimentar y cuidar al bebé y a ella misma y delegue las otras tareas a familiares o amigos.

Deben acomodar la casa para que sea lo más práctica posible, por lo que suele ser más cómodo tener la cuna del bebé cerca de su cama.

Las visitas de familiares y amigos pueden ser muy agradables pero a la vez muy agotadoras para las madres. Ellas no deberían tener obligación en atenderlas ni tener ningún inconveniente en retirarse a descansar o alimentar al bebé si es necesario.

De acuerdo con su médico es importante que salga cada día a la calle a caminar un rato aprovechando alguna siesta del bebé para tener un poco de tiempo para ella y no sentirse sobrepasada con la nueva situación. Si es posible se recomienda tener ayuda en casa para las tareas domésticas, sea de familiares o de asistentes a domicilio.

Con el Seguro de MAPFRE Salud podrás consultar con un equipo de profesionales todas las dudas relacionadas con la salud.