Hoy en día en muchos hogares no se concibe el desayuno sin “cereales del desayuno” pero si no escogemos bien qué cereales consumimos más vale que nos quedemos con las versiones antiguas de desayuno y volvamos al pan.¿Todos los cereales de desayuno son iguales?

Si estamos pensando en toda la variedad de cereales que se venden embolsados o incluso a granel, rotundamente no, no todos son iguales, entre unos copos de avena integral y unos cereales a base de cereal refinado con chocolate, caramelo o cualquier otro azúcar hay un abismo a nivel nutricional. Ahora bien, si sólo nos quedamos ante el lineal de cereales del supermercado las diferencias no son realmente muy notables.

En este apartado podemos encontrar cereales chocolateados y azucarados dirigidos a público infantil, cereales “especiales” para cuidar la línea, o ricos en fibra para evitar el estreñimiento y otro tipo de productos algo diferentes como son los muesli, con sus variantes más exóticas para gourmets, con frutos secos y chocolate, con frutas tropicales desecadas o con frutos rojos, etc.

¿En qué fijarnos?

Como ocurre en muchas otras ocasiones lo que nos va a facilitar la tarea de escoger es el etiquetado, la lista de ingredientes y la información nutricional sobre el producto.

Los datos claves en los que debemos fijarnos son:
En el listado de ingredientes:

  • La longitud del listado. Aunque no siempre es estrictamente así, normalmente un listado muy largo indica que estamos frente a un producto procesado.
  • Los componentes del listado. Si son cereales en sí, azúcares, frutas u otro tipo de sustancias añadidas.
  • El orden del listado: recordemos que se enumeran los ingredientes de mayor a menor cantidad presente en el producto, por ello los primeros ingredientes deberían ser los cereales.

En el cuadro de composición nutricional:

  • La cantidad de azúcares simples del producto, suele ser el punto más dispar en los cereales de desayuno.
  • La cantidad de grasas, y entre ellas el porcentaje de grasa saturada.
  • La cantidad de fibra de los cereales, siempre es preferible escoger cereales integrales, o granos enteros, como se indica en inglés “whole grain cereals”.

Este cuadro nos va a servir como orientación sobre el contenido nutricional del producto, pero sobre todo como comparativa entre diferentes tipos de cereales. También como comparativa, y especialmente si nos interesa controlar el aporte calórico de la dieta, revisaremos también las kilocalorías totales del producto.

Cuestión de azúcar

Existe una gran diferencia a nivel nutricional entre unos copos de avena, sin ningún otro ingrediente añadido y unos cereales procesados que incluyen muchos otros ingredientes además del cereal en cuestión. Mientras los segundos pueden contener más de un 35% de azúcares, unos copos de avena contienen aproximadamente un 1% de azúcares.

¿Los “cereales de desayuno” son realmente una buena opción de desayuno?

Sabemos que no se debe generalizar sino tener en cuenta las características y objetivos de la persona y factores como la cantidad que consumimos y si se complementan o no con otros alimentos. Ahora bien, las cifras hablan por sí solas y cada uno puede sacar sus propias conclusiones a partir de la siguiente tabla. A modo de reflexión y ejemplo, sí que es recomendable observar que, mientras 100 g del “demonizado” pan (pan integral), contienen 229 Kcal, 2,3 gramos de azúcar y 7 g de fibra, unos cereales chocolateados proporcionan alrededor de 400Kcal, más de 35 g de azucares y menos de 1 g de fibra. Y sin irnos al extremo de los chocolateados, unos cereales tipo “cuida tu línea” proporcionan unas 375 Kcal, 15 g de azúcares y 4,5 g de fibra. ¿Sorprendidos? Quizás resultará que el pan no es tal malo “como lo pintan”…

Ventajas

  • Son fáciles de consumir y no requieren preparación y suelen ser bien aceptados por los niños, no sólo los azucarados sino también los granos de cereal hinchado “sin más”.
  • Al haberse convertido en un alimento de consumo bastante masivo, a menudo se suplementan con vitaminas y minerales.
  • En muchos casos, esta suplementación es innecesaria en caso de llevar una alimentación adecuada, pero en determinados casos sí que puede resultar una ventaja.

Inconvenientes

  • Muchos de ellos son productos altamente procesados con un contenido de azúcares bastante considerable.
  • Pueden desplazar a otros alimentos e ingredientes que son muy saludables y muy buena opción en ingestas como el desayuno, la media mañana o la merienda. Hablamos de fruta, pan, lácteos, frutos secos…

¿Cómo tomarlos?

Si decidimos consumir cereales del desayuno hemos de tener en cuenta la información nutricional y el etiquetado para realizar una buena elección. Tomaremos una cantidad moderada de forma que no sean el único alimento de la ingesta. Los completaremos combinando su ingesta con alimentos como la fruta fresca, los frutos secos o pan integral. Y a pesar de tener muy introducido su consumo junto a la leche, los podemos tomar con bebidas vegetales, mezclados con yogur, con fruta fresca, etc.

Lo que debes saber…

  • Es importante saber que no todos los cereales que se venden “para desayuno” son iguales y que los aportes de azúcares y grasas pueden variar mucho.
  • Lo que nos facilitará la tarea de escoger es el etiquetado, la lista de ingredientes y la información nutricional sobre el producto.
  • Un ejemplo: mientras que unos cereales procesados pueden contener hasta un 35% de azúcares, unos copos de avena sin más tan sólo un 1%.

Si necesitas orientación médica 24 horas, ayuda personalizada a domicilio o asistencia médica especializada, recuerda que el Seguro de MAPFRE Salud incluye esas coberturas y otras ventajas.

CALCULA TU PRECIO