Pólipos nasales: ¿debo operarlos?

Resumen del contenido
Licenciada en Medicina y Cirugía Universidad de Salamanca. Suficiencia investigadora en Medicina y Cirugía Universidad de Salamanca. Especialista en Medicina Familiar y Comunitaria Universidad de Barcelona. Telehealth, as a tool in Chronic Disease Management por la Harvard Medical School, Boston, EE.UU.
Los pólipos nasales son crecimientos benignos, blandos al tacto, que se desarrollan en la mucosa de revestimiento de la nariz o de los senos paranasales. A diferencia de otras formaciones, no son cancerosos y suelen aparecer en grupos, asemejándose a racimos de uvas. Estos pólipos pueden variar en tamaño y, aunque los más pequeños pueden no causar síntomas, los más grandes pueden obstruir las vías nasales, provocando dificultades respiratorias y otros problemas.
¿Cuándo y por qué aparecen?
Los pólipos nasales pueden desarrollarse a cualquier edad, aunque son más comunes en adultos jóvenes y de mediana edad. Su aparición está relacionada con la inflamación crónica de la mucosa nasal y de los senos paranasales, una condición conocida como sinusitis crónica. Las causas exactas de los pólipos nasales no se conocen completamente, pero se cree que factores como infecciones recurrentes, alergias, asma, sensibilidad a la aspirina o condiciones genéticas como la fibrosis quística, pueden aumentar el riesgo de padecerlos.
¿Cuáles son los síntomas más habituales de los pólipos nasales?
Los pólipos más pequeños pueden ser totalmente asintomáticos. Los de mayor tamaño pueden manifestarse de diferentes formas. Los síntomas más comunes incluyen obstrucción nasal, goteo nasal, sangrado espontáneo, pérdida del sentido del olfato y del gusto, dolor facial y/o cefaleas. Además, pueden aumentar el riesgo de infecciones recurrentes de los senos paranasales (sinusitis) y empeorar condiciones respiratorias como el asma. En casos muy severos, pueden llevar a complicaciones graves como la apnea del sueño, o la aparición de infecciones diseminadas como meningitis o abscesos cerebrales.
¿Cómo se diagnostican los pólipos nasales?
El diagnóstico de los pólipos nasales se realiza habitualmente con una evaluación de los síntomas y un examen físico en consulta médica. El especialista (habitualmente otorrinolaringólogo) puede utilizar una endoscopia nasal, que implica la inserción de una sonda con una cámara pequeña para visualizar el interior de la nariz y de los senos paranasales.
En algunos casos, se pueden realizar estudios por imagen como radiografía, tomografía computarizada o resonancia magnética, para determinar el número, tamaño y la ubicación de los pólipos.
En otras ocasiones se pueden realizar pruebas de alergia y/o análisis de sangre para identificar posibles factores subyacentes.
¿Cómo se tratan los pólipos nasales?
El tratamiento de los pólipos nasales puede variar según la severidad de los síntomas y la respuesta del paciente a los tratamientos iniciales. Las opciones de tratamiento más habituales incluyen:
- Medicamentos: los esteroides nasales en forma de aerosoles son comúnmente utilizados para reducir la inflamación y el tamaño de los pólipos. En casos más severos, se pueden prescribir esteroides orales o inyectables. Otros medicamentos incluyen antihistamínicos para tratar alergias o antibióticos en caso de sinusitis bacterianas.
- Biológicos: medicamentos biológicos como dupilumab, mepolizumab y omalizumab pueden ser utilizados en pacientes seleccionados, con pólipos nasales muy sintomáticos y/o que reaparecen después del tratamiento inicial.
- Cirugía: si los medicamentos no son efectivos, se puede considerar la cirugía endoscópica nasosinusal. Este procedimiento mínimamente invasivo implica la inserción de un endoscopio a través de las fosas nasales para eliminar los pólipos y/o corregir cualquier problema estructural en los senos paranasales.
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¿Cuándo deben operarse los pólipos nasales?
La cirugía se recomienda cuando los pólipos nasales causan obstrucción nasal severa, infecciones recurrentes de los senos paranasales, o cuando los tratamientos médicos no han sido efectivos. La decisión de operar también puede depender de la frecuencia y severidad de los síntomas y del impacto en la calidad de vida del paciente.
¿En qué consiste la operación de pólipos nasales?
La cirugía endoscópica nasosinusal es el procedimiento más común para la eliminación de pólipos nasales. Durante esta operación, el cirujano introduce un endoscopio a través de las fosas nasales para visualizar y eliminar los pólipos. El procedimiento también puede incluir la ampliación de las aberturas de los senos paranasales para mejorar el drenaje y prevenir futuras infecciones. La cirugía es mínimamente invasiva y generalmente se realiza de manera ambulatoria, permitiendo al paciente regresar a casa el mismo día.
Lo que debes saber…
- Los pólipos nasales son una condición común que puede afectar significativamente la calidad de vida de los pacientes.
- Aunque no son cancerosos, pueden causar una variedad de síntomas molestos y complicaciones si no se tratan adecuadamente.
- El diagnóstico temprano y el tratamiento adecuado, que puede incluir medicamentos y/o cirugía, son esenciales para manejar esta condición y mejorar la salud respiratoria del paciente.
Bibliografía
- La Guía POLINA. Documento de consenso sobre rinosinusitis crónica con poliposis nasal 2024.
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