¿Qué es una liposucción y cómo se realiza?

Resumen del contenido
Graduada en medicina UPF-UAB.
Máster en medicina estética y anti-envejecimiento COMB-UB.
Licenciada en Comunicación URL.
La liposucción es mucho más que una operación estética. Para muchas personas, representa una oportunidad de recuperar confianza, de verse al espejo y reconocerse de nuevo. Pero, como todo procedimiento médico, requiere información clara, expectativas realistas y, sobre todo, una decisión bien pensada.
¿Qué es una liposucción?
La liposucción, también conocida como lipoescultura, es un procedimiento quirúrgico que elimina grasa localizada en ciertas zonas del cuerpo. No está pensada para bajar de peso, sino para remodelar la silueta cuando el ejercicio y la alimentación ya no son suficientes.
¿Cómo se hace?
El cirujano inserta unas cánulas finas a través de pequeñas incisiones en la piel y aspira la grasa con ayuda de un dispositivo de succión. Antes, se infiltra una solución que ayuda a reducir el sangrado y facilita la extracción. En manos expertas es una técnica segura y muy efectiva.
Dependiendo del caso, se puede realizar con anestesia local y sedación, o bajo anestesia general. El tiempo en quirófano suele variar entre una y tres horas. En la mayoría de los casos, no hace falta hospitalización.
¿Cuándo está indicada?
Este procedimiento se recomienda en personas con buen estado de salud general, un peso estable (o cercano al ideal) y acúmulos de grasa bien localizados que no desaparecen con dieta ni con entrenamiento.
Y es que a veces, por más que uno lo intente, hay zonas que simplemente no responden: el abdomen, los flancos, los muslos, los brazos, la papada… En hombres, también es frecuente en el pecho (cuando hay ginecomastia grasa) y la zona abdominal.
Pero atención: la calidad de la piel es clave. Si la piel está muy flácida, puede ser necesario combinar con otros tratamientos o incluso con cirugía para eliminar el exceso.
Si tienes dudas sobre si la liposucción es el tratamiento indicado para ti, en los Seguros de Salud de MAPFRE contarás con grandes especialistas que te asesorarán y recomendarán el tratamiento que mas se ajuste a tus necesidades.
Tipos de liposucción
Hoy no hablamos solo de “una liposucción”. Existen varias técnicas, algunas con nombre propio, y elegir bien depende de las características del paciente, el objetivo y la experiencia del cirujano.
Liposucción tumescente (la clásica)
Es la técnica más utilizada. Se infiltra una gran cantidad de líquido en la zona a tratar antes de aspirar la grasa. Es segura, eficaz y permite tratar grandes áreas con menos sangrado.
VASER® (ultrasonido)
Usa ondas ultrasónicas para disolver la grasa antes de extraerla. ¿La ventaja? Mayor precisión, menos daño a los tejidos, y mejores resultados en zonas donde se busca más definición muscular, como el abdomen o los pectorales (ideal en liposucción “high definition”).
SmartLipo® (láser)
Aquí entra en juego la energía láser para licuar la grasa y, de paso, estimular la piel para que se retraiga mejor. Es útil en áreas pequeñas o con piel fina, como el cuello o la cara interna de los brazos.
BodyTite® (radiofrecuencia)
Combina aspiración con radiofrecuencia interna para tensar la piel al mismo tiempo que se elimina grasa. Es una buena alternativa cuando hay cierta flacidez, pero se quiere evitar una cirugía más extensa.
¿Y sin cirugía? Criolipólisis y otras técnicas
Aunque no son técnicamente liposucciones, se habla mucho de tratamientos como la criolipólisis (CoolSculpting®), la cavitación o la radiofrecuencia externa. Son procedimientos no invasivos que reducen grasa poco a poco, sin bisturí. Funcionan en casos leves, pero los resultados son más sutiles y necesitan varias sesiones.
¿Y los riesgos?
Ninguna intervención está libre de riesgos, y es importante hablar de ellos sin alarmismos, pero con seriedad. Los más comunes incluyen hematomas, hinchazón, irregularidades en la piel, cambios de sensibilidad o acumulación de líquido (seromas). En procedimientos extensos o mal realizados, pueden aparecer complicaciones más graves como trombosis o infecciones.
Según estudios internacionales, la tasa de complicaciones graves es baja (alrededor del 0,7%), pero sigue siendo una cirugía, y por eso es clave ponerse en buenas manos.
Antes de la operación
El proceso empieza mucho antes del quirófano. Durante la consulta médica se evalúa tu estado general, tus expectativas y las zonas a tratar. El cirujano también valorará si tu piel se retraerá bien o si necesitas combinar la técnica con otros tratamientos.
Algunos consejos antes del día “D”:
- Evita antiinflamatorios y anticoagulantes al menos una semana antes.
- Si fumas, lo ideal es dejarlo temporalmente: el tabaco afecta la cicatrización.
- Hidrátate, aliméntate bien y no temas hacer todas las preguntas que necesites.
- La verdad es que sentirse bien informado reduce la ansiedad y mejora la experiencia.
Postoperatorio
Después de la cirugía, es normal tener molestias similares a unas agujetas intensas. También aparecerán hematomas e hinchazón, pero eso irá cediendo. Lo importante es no apresurarse: los resultados reales se ven pasados varios meses, a medida que la inflamación baja y la piel se adapta.
Indicaciones frecuentes:
- Usar una faja compresiva durante 4 a 6 semanas.
- Caminar desde el primer día (con suavidad).
- Evitar esfuerzos intensos al menos durante dos semanas.
- Hacer masajes de drenaje linfático si el médico lo recomienda.
- Cada cuerpo es un mundo, y cada recuperación también.
Consejos
- No te operes con quien te vende descuentos. Hazlo con quien te da confianza.
- Busca un cirujano acreditado en cirugía plástica y estética. No todos los que hacen liposucción son especialistas.
- Pregunta, compara, investiga. Las redes sociales muestran “el después”, pero tú necesitas saber todo el “durante”.
- Hazlo por ti, no por presiones externas. La liposucción puede ayudarte a verte mejor, pero no tiene sentido si no estás convencido desde adentro.
- La liposucción es una herramienta. No cambia quién eres, pero puede ayudarte a verte —y sentirte— más en sintonía contigo mismo.
Lo que debes saber…
- La liposucción es un procedimiento quirúrgico para eliminar grasa localizada y remodelar la silueta, no para perder peso.
- Existen varias técnicas según las necesidades y características del paciente, cada una con ventajas específicas.
- Es fundamental informarse bien, elegir un cirujano acreditado y tener expectativas realistas para una recuperación segura y satisfactoria.
Referencias bibliográficas
- SECPRE (Sociedad Española de Cirugía Plástica, Reparadora y Estética): https://secpre.org/liposuccion
- ISAPS (International Society of Aesthetic Plastic Surgery): https://www.isaps.org/discover/patients-home/procedures/body-procedures/liposuction/
Comentarios (0)