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Tartamudez en niños explicada por un experto

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La tartamudez es una alteración de la fluidez normal del habla que dificulta la comunicación social. Es una de las consultas más frecuentes del desarrollo del lenguaje en el niño
Doctora Esther Martinez
Dra. Esther Martínez
Nº Colegiado 080837747 | Licenciada en Medicina y Cirugía. Especialista en Pediatría con Formación en Alergología de MAPFRE | Web

Pediatra, experta en acupuntura y nutrición oncológica. Actualmente lidera la Unidad de Oncología Pediátrica Integrativa del Hospital Sant Joan de Déu Barcelona. Ha sido pionera en España desarrollando la acupuntura infantil como un procedimiento médico complementario, seguro e indoloro. Compagina su trabajo con la docencia.

La tartamudez es una alteración de la fluidez normal del habla que dificulta la comunicación social. Es una de las consultas más frecuentes del desarrollo del lenguaje en el niño. De hecho, afecta a aproximadamente uno de cada 100 escolares. Se dan más casos entre niños que en las niñas, en una proporción 3:1, y la edad de inicio se sitúa entre los 2 y 5 años, coincidiendo con la consolidación del lenguaje.

¿Qué es la Pseudotartamudez?

Hay que diferenciar entre tartamudez y pseudotartamudez. Se habla de tartamudeo cuando el niño repite las sílabas, los sonidos, las palabras o las frases enteras, o bien cuando titubea para empezar a hablar. En cambio, la pseudostartamudez se da alrededor de los dos años cuando el niño simplemente repite las palabras que acaba de aprender y que todavía le resultan demasiado complicadas.

Muchos de los problemas de fluidez (entre el 65 y el 85%) desaparecen espontáneamente, sin tratamiento, en los dos años posteriores a su aparición, pero entre el 20 y el 50% de estos problemas iniciales pueden continuar hasta la edad adulta.

¿Cuáles son las causas?

Lo más frecuente es que la tartamudez sea un trastorno de tipo emocional o relacional, que se manifiesta en la comunicación verbal y se ve agravado o mejorado según el estado emocional del niño. Cuando se equivoca, el niño intenta controlarse y corregirse, pero cuanto más se controla, peor se expresa, aumentando sus tartamudeos.

¿Cómo detectarlo?

Los síntomas de la tartamudez son los siguientes:

  • Falta de fluidez en el habla:  interjecciones, prolongaciones, repeticiones (de sonidos, sílabas, palabras o grupos de palabras) o bloqueos.
  • Subidas bruscas del tono de voz.
  • Alteración funcional de la respiración y tensión en los músculos de los órganos fonatorios: boca, laringe, cara…
  • Movimientos anormales asociados:  muecas, inclinaciones de cabeza, golpes con el pie o encogimiento de hombros.
  • Cambios en la velocidad del habla.
  • Taquicardia y/o temblores.
  • Sentimientos de frustración, ansiedad o vergüenza.

Cómo actuar

Lo que sí hay que hacer…

  • Dedicar todos los días 15 o 20 minutos para hablar con el niño :  ver/leer algún cuento juntos o hacerle comentarios sobre lo que el adulto ha hecho a lo largo del día son maneras de conversar con el niño de forma agradable, sin prisas y demostrándole que se disfruta hablando con él/ella.
  • Fomentar un clima de comunicación en la familia: este clima tiene que ser agradable y distendido, sin acribillar a preguntas al niño ya que podría sentirse como puesto a prueba o pasando un examen.
  • Hablar con el niño sin corregirle constantemente si se equivoca:  de este modo, él gana en seguridad y confianza. Es mejor contestar a lo que ha preguntado de forma correcta, con una buena dicción y despacio, que corregir sus errores. Debemos de ser modelos a imitar del habla que queremos que presente el niño.
  • Prestar más atención a lo que dice que a las faltas de fluidez : no hay que mostrar preocupación ni desaprobación cuando se produzca una falta de fluidez.
  • Estimular el lenguaje y la articulación de palabras mediante canciones y trabalenguas: es una manera divertida de aprender.
  • Hablar despacio y con pausas: el niño podrá imitarnos y, además, si le hablamos despacio, tendrá más tiempo de entender lo que le estamos diciendo y podrá elaborar más fácilmente su respuesta.
  • Esforzarse por entender al niño evitando que lo repita todo muchas veces.
  • Dar al niño todo el tiempo que necesite para hablar, estableciendo contacto visual: hay que esperar a que termine de hablar, sin mostrar impaciencia.
  • Hablar con frases cortas y sencillas , adecuadas al nivel de madurez del niño: para ello, podemos fijarnos en el número de palabras por frase que dice normalmente el niño y emplear un número similar en nuestras frases hacia él.
  • Desdramatizar la situación: si el niño es consciente de su tartamudez, debemos asegurarle que no es nada grave y que con el tiempo mejorará.
  • Reforzar positivamente: mostrar alegría cuando habla con fluidez y felicitarlo por los logros conseguidos.

 Lo que no hay que hacer…

  • No etiquetar al niño de “tartamudo”: no tiene que sentirse distinto por su tartamudez pero sí tiene que reconocer que existe una dificultad en el habla.
  • No prestar demasiada atención al problema:  de este modo, evitamos que el niño se angustie, se ponga nervioso y tartamudee más.
  • No interrumpir cuando el niño hable ni completar sus frases.
  • No decirle que hable más despacio.
  • No darle consejos en el momento que cometa errores: comentarios como “habla despacio”, “tranquilo” o “respira” mientras el niño está intentando expresarse pueden generarle más nerviosismo y angustia.
  • No reírse nunca de él.
  • No obligar al niño a exhibir sus progresos ante gente y no presionarle para que hable con otros adultos cuando no quiera hacerlo:  hablar bajo presión puede dificultar la fluidez.

Acudir al pediatra si…

  • La tartamudez persiste más allá de los cinco años.
  • Se acompaña de muecas o tics.
  • Si en la familia hay antecedentes de tartamudez en la edad adulta.
  • Si no dice palabras a los 18 meses ni frases a los dos años y medio.

¿Tiene tratamiento?

La tartamudez puede producir un sufrimiento intenso en los niños que la padecen. Incluso, en sus formas moderadas o ligeras, los niños tartamudos necesitan apoyo y ayuda en los tres aspectos del problema: habla, emocional y social.

El tartamudeo evolutivo es transitorio y no necesita tratamiento. A partir de los cinco años puede superarse o no mediante el tratamiento de un logopeda o un psicólogo. La intervención terapéutica debe abarcar aspectos de fluidez, psicológicos y sociales; y debe incluir a la familia, a los tutores y a los compañeros de clase, además del propio niño.

El objetivo del tratamiento es disminuir en la medida de lo posible el tartamudeo y evitar las consecuencias negativas en el habla, en la comunicación, en los aspectos emocionales y sociales.

La erradicación total del tartamudeo es posible en algunos casos. En otros, el objetivo es disminuirlo para conseguir que el niño acepte su tartamudeo y consiga comunicarse eficazmente.

Lo que debes saber…
  • Entre el 65 y 86% de los problemas de fluidez desaparecen espontáneamente en los dos años posteriores a su aparición.
  • La falta de fluidez en el habla, las muecas o encogimiento de hombros, y los sentimientos de frustración, ansiedad o vergüenza, son síntomas de la tartamudez.
  • Para ayudar al niño, debemos evitar corregirle constantemente, darle confianza, estimular el lenguaje y la articulación de palabras mediante canciones, y actuar como ejemplo.
Publicado por Dra. Esther Martínez
- 14 Jun, 2021
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Comentarios (6)

  1. Hola mi hijo que va a cumplir 11 años sufre de una pequeña disfemia episódica pero ya lleva 2 años así. Tiene días que poco se nota y otros más acentuados. El tratamiento para ayudarle sería logopeda o una terapia psicóloga? Busco por Madrid, Fuencarral-el pardo. Un saludo

    • Apreciada Raquel,
      En el caso de su hijo, que tiene 11 años, y por lo que cuenta parece que tiene una disfemia episódica leve, iniciaría el tratamiento con logopeda. Si en algún momento notara que a su hijo le puede afectar emocionalmente o bien «empeora» la tartamudez en situaciones que está más nervioso, entonces recurriría puntualmente a terapia con psicóloga. Pero, de entrada, mi consejo es que sea con un/a logopeda, pienso que a esta edad le beneficiara más. Un saludo

  2. Tengo un niño de 6 años que necesita la atención de un logopeda llevo meses tratando de concertar una cita con un logopeda de la compañía que lo pueda atender y no encuentro a ninguno que lo pueda atender, el niño cuenta con este servicio en su poliza

    • Hola Angela,
      Le facilitamos algunas clínicas de logopedia en su localidad:
      CIMPER (CTRO. REHABILITACION LENGUAJE), Av. Carlos Haya 156, 29010, Málaga. 952395395
      SRA. CAÑAMERO MARTIN, MARIA C/ Alameda Colon 2 29001, Málaga 952220507
      HOSPITAL QUIRONSALUD MALAGA Av. Imperio Argentina 129004, Malaga 902448855 / 952176120
      Un saludo

    • Hola tengo un niño de 10 años y necesito que lo vea un logopeda de la compañía, pero no sé qué centro buscar. Muchas gracias ?

      • Hola Salvador,
        Le podrán facilitar toda la información llamando al 918 365 365. Un saludo

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