⌚ 4 Min de lectura | LO QUE DEBES SABER… Los varones tienen mayor probabilidad de padecer patologías coronarias que las mujeres, y está en sus manos controlar este riesgo mediante el ejercicio físico y la alimentación. La alimentación no obra milagros, pero en caso […]
- Los varones tienen mayor probabilidad de padecer patologías coronarias que las mujeres, y está en sus manos controlar este riesgo mediante el ejercicio físico y la alimentación.
- La alimentación no obra milagros, pero en caso de caída de cabello asegurar la ingesta de determinados nutrientes (selenio, zinc, biotina…) es importante.
- Los hábitos de vida y de alimentación pueden influir en la calidad del esperma y, por tanto, en la fertilidad masculina.
CORAZÓN SANO
Entre los problemas de salud que más comúnmente se asocian a los hombres encontramos las patologías cardiovasculares. Cuando las mujeres llegan a la menopausia el riesgo de padecer este tipo de enfermedades empieza a equipararse, pero hasta ese momento los problemas coronarios son más propios de los hombres. Existen factores extrínsecos como el ejercicio y la alimentación que pueden influir muy positivamente en nuestra salud disminuyendo dicho riesgo. En este caso buscaremos alimentos probres en grasas saturadas y colesterol y ricos en ácidos grasos monoinsaturados y poliinsaturados, especialmente de la serie omega 3, y también ricos en antioxidantes:
- Pescado azul, nueces, semillas de lino.
- Aceite de oliva.
- Frutas y vegetales frescos, legumbres y frutos secos (nueces, almendras, avellanas, almendras y piñones).

Se considera que una dieta rica en licopeno disminuye el riesgo de padecer cáncer de próstata en personas con antecedentes genéticos. Por otra parte las semillas de calabaza también parecen tener un efecto positivo sobre este tipo de patologías. Así pues, aunque aún no se consideren estos alimentos como parte del tratamiento su ingesta puede ser beneficiosa.
CAÍDA DEL CABELLO
Es habitual en muchos hombres la preocupación por la caída del cabello, que se puede ver favorecida por diferentes causas como el envejecimiento, motivos genéticos, ciertas patologías o el uso de determinados fármacos o tratamientos, mal cuidado del cabello, etc. Pero también existen causas dietéticas que pueden influir en la caída del cabello como lo son la desnutrición y concretamente el déficit vitamínico y mineral, el alcoholismo y el seguimiento de alguna de las conocidas como dietas milagro por ser excesivaente bajas en calorías, entre otros motivos.
Según la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA), los micronutrientes que contribuyen al mantenimiento capilar son la biotina, el cobre, el selenio y el zinc. No es común en Europa que se den déficits de estos nutrientes, pero no está de más asegurarnos de que nuestra ingesta es suficiente mediante una alimentación adecuada.
- Biotina: cereales, chocolate, yema del huevo, legumbres, leche, nueces…
- Cobre: ostras y otros mariscos, cereales (grano entero), legumbres, nueces, patatas, verduras de hoja oscura, frutas deshidratadas, cacao, pimienta negra…)
- Selenio: verduras (principalmente), pescado, mariscos, carnes rojas, granos, huevos, pollo…)
- Zinc: carnes, especialmente carnes oscuras, nueces, granos enteros, legumbres…)

Realizar alimentación equilibrada evitando exceso de grasas como el que puede provenir de embutidos y carnes grasas, lácteos enteros, bollería, frituras, salsas, guisos grasos…
Evitar las bebidas alcohólicas y los refrescos, ambos suelen suponer un aporte elevado de calorías, además el alcohol contribuye directamente en el crecimiento de depósitos grasos.
Realizar ejercicio físico habitual para incrementar el gasto energético.
FERTILIDAD
El estilo de vida y la alimentación también influyen en la calidad el esperma y en la fertilidad masculina. Tanto el alcohol como el tabaco se han relacionado con peor calidad espermática y por ello la eliminación de estos tóxicos forma parte de las actuaciones que se deben llevar a cabo si se está buscando un embarazo.
También es importante cuidar la dieta y determinados nutrientes, como los ácidos grasos omega 3 y concretamente de DHA (proviene de pescados, sobre todo pescados azules, y algas), ya que cuando es insuficiente se observa una menor concentración y movilidad espermática y un aumento de las formas anormales. Por otra parte debemos cuidar nuestra alimentación procurando una ingesta rica en productos frescos pues la reducción en la ingesta de frutas se ha asociado con el riesgo de oligozoospermia (baja cantidad de espermatozoides en el semen).
Mercè GonzaloDiplomada en Nutrición Humana y Dietética
Licenciada en Ciencia y Tecnología de los Alimentos
Nutricionista consultora de Advance Medical
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